Lectura 09.08.12

A Don Manuel Gálvez Ortega.
A lo largo de los años nos enfrentamos a grandes retos, a las adversidades, vivimos grandes alegrías y tremendas decepciones. Lo bueno y lo mejor que puede darte esta vida es tener una familia a la que aferrarte cuando algo no funciona, con la que poder disfrutar de los placeres y de los triunfos. Tenemos suerte de ti, que has sabido disfrutar de todo lo que te has ganada y has afrontado lo que venía de espaldas. Nos has enseñado a superar nuestros miedos, a reír de todo aquello que tenía o no remedio. También a ser fuertes, a querer por encima de todo. Nos has dado grandes lecciones, nos has regalado a la mejor persona de este mundo.

En tu gesto veo una vida llena, completa, repleta de sabiduría, amor y ternura. En esta vida hay gente que está de paso, pero tú has hecho todo lo que tenías en tus manos, has conseguido incluso más que eso. Y ahora es tu momento, el momento de descansa y dejar en nosotros todo lo que siempre serás.

No quiero despedirme de ti. Des de que nací te llevo conmigo y así será siempre. “Lo bueno nunca termina si hay algo que te lo recuerda”, y tu recuerdo permanecerá intacto en mi corazón, dentro de mi alma. Sé que podré aferrarme a tus manos cuando lo necesite, sé que cuidarás de mí como siempre lo has hecho. Sé que no me abandonas. Para mí no se acaba aquí, mara mi no te has ido, te mantendré vivo a base de los miles de recuerdos que hay forjados en nuestras memorias. Alguien como tú no desaparece así como así, las grandes personas permanecen si de verdad las quieres contigo. Y yo te quiero, nosotros te queremos. Y por eso te dejo ir para que descanses en paz y deseo con todas mis fuerzas que allá donde vayas te encuentres todo lo que te mereces, que disfrutes de tus mayores placeres para poder pasar el resto de tu vida feliz.

Quiero que te lleves tus herramientas para seguir haciendo apaños, que prepares un gran jardín que esté a rebosar de flores, que tengas un cortijo para poder estar con tus hermanos y para que algún día estemos todos juntos comiendo migas y oler a castañas tostadas a media mañana. Llévate tu chándal y tus bambas de ocasión para mantenerte en forma con la bici, pero ponle un sillín nuevo que sea más cómodo. No olvides el domino y sigue practicando las palabras que sabes en inglés.

Y ahora vuela, vuela a lo más alto y no dejes que nada te pare. Cuídanos y no olvides a quien te quiere y te ama. Seguirás latiendo con fuerza para siempre. Descansa avi, abuelo, papá, tito, hermano, marido… y no dejes de alumbrar nuestras vidas.

Y como tú bien dices, y cito textualmente: “Bicho malo nunca muere.”

Gracias.

08.08.12